LIBRO DE ENOC - CAPÍTULO 39 - PRIMERA PARÁBOLA. PARTE 1

Escritos Alternativos

El Libro de Enoc

 

Capítulo 39

 

Continuamos con la Primera Parábola, y esta porción es de las más reveladoras y emocionantes, que podamos leer.

Veamos, paso a paso

 

Leamos:

 

Capítulo 39

1 Y ocurrirá en esos días que los hijos de los elegidos y santos descenderán de lo alto del cielo y su linaje llegará a ser uno con el de los hijos de los hombres.

Así como la lluvia que cae desde los cielos y desciende sobre la tierra, viaja hasta reunirse con el mar, los hijos de Dios descendieron desde los cielos y se reunieron con los hijos de los hombres, para ser uno.

¡Grande es la misericordia de Yahweh, Dios nuestro!

Los hijos de Dios, los santos y elegidos, son como las aguas que descienden desde los cielos. Los hijos de los hombres, que son de los linajes malos que no provienen de Dios, sino de la obra de los satanes, son representados por el mar.

Dios ha permitido que se mezclen y sean uno, para que, por gracia, sean santificados y recibidos arriba. Pero, claro está, esto no es para todos.  

Cuando los santos y elegidos desciendan del cielo, con el Adón Yahshúa, gobernarán en una tierra donde solo habrá habitantes que quedaron después del ascenso, de los santos y del tiempo de la ira y serán uno con ellos.

 

2 Enoc recibió los libros del celo y la ira y los libros de la angustia y el destierro: "Nunca más obtendrán misericordia", dijo el Señor de los espíritus.

 

Se refiere acá Enos a los poderosos de la tierra, que fueron mencionados en la Primera Parábola, capítulo 38. Estos libros serán abiertos durante el juicio, como nos dice Apocalipsis 20: 12; “Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.

 

3 Y las nubes me cubrieron, y el viento me levantó de la superficie de la tierra y me dejó en el límite de los cielos.

Enoc es llevado a los cielos

 

4 Allí tuve otra visión: vi el lugar donde habitan los santos y el lugar de descanso de los justos.

5 Ahí contemplé con mis ojos las moradas en medio de los ángeles de justicia y sus lugares de descanso entre los santos. Mientras suplican y oran por los hijos de los hombres, la justicia brota entre ellos como el agua y la misericordia se esparce sobre ellos como el sobre el rocío sobre la tierra, por los siglos de los siglos.

Enoc puede ver el lugar que espera a los santificados, por la obra del Mesías.

 

6 En ese lugar con mis ojos vi al Elegido de Justicia y de Fe; la justicia prevalecerá en sus días y los justos y los elegidos serán innumerables ante él por los siglos de los siglos.

Puede ver en ese lugar hermoso, al Adón Yahshúa, el Rey de reyes y Señor de señores, como la justicia anunciada. Como dice el Salmo 85. “La misericordia y la verdad se encontraron;
La justicia y la paz se besaron.  La verdad brotará de la tierra, y la justicia mirará desde los cielos. Yahweh dará también el bien, y nuestra tierra dará su fruto
”.

 

 

7 Vi su morada bajo las alas del Señor de los espíritus; todos los justos y los elegidos brillarán frente a él como el resplandor del fuego; su boca estará llena de bendición; sus labios glorificarán el nombre del Señor de los espíritus; y la justicia y la verdad no fallarán ante él.

Él puede observar a los santos honrando al DIOS TODOPODEROSO, Yahweh de los ejércitos.

 

8 Yo deseaba vivir allí y mi espíritu anhelaba esa morada: esa era desde antes mi herencia, tal y como había sido establecida para mí ante el Señor de los espíritus.

9 En esos días alabé y ensalcé el nombre del Señor de los espíritus con bendiciones y alabanzas porque Él me ha destinado para la bendición y la gloria de acuerdo con el buen parecer del Señor de los espíritus.

10 Por mucho tiempo mis ojos observaron ese lugar y lo bendije a Él y lo alabé diciendo: "Bendito es Él y bendito sea desde el principio y para siempre".

11 Ante Él no hay renuncia; Él sabe desde antes de que el mundo fuera creado qué es para siempre y qué será de generación en generación.

Un lugar hermoso y de paz, que Enoc anhelaba para sí.

 

12 Aquellos que no duermen te bendicen; ellos están ante tu Gloria y bendicen, alaban y ensalzan diciendo: " Santo, Santo, santo es el Señor de los espíritus, Él llena la tierra con espíritus".

13 Mis ojos vieron allá a todos aquellos que no duermen, bendiciendo y diciendo: "Bendito seas tú y bendito sea el nombre del Señor de los espíritus por los siglos de los siglos".

 

Los que no duermen son los santos ángeles.

14 Mi rostro fue cambiado y no podía sostener la mirada.

 

 

PREGUNTAS

1.       ¿Quiénes son, para ti, los santos y elegidos que descienden del cielo”? _______________
__________________________________________________________________________

2.       ¿Reconoces cuáles son los libros de la ira? ________________________________________ __________________________________________________________________________

3.       ¿Cuál nombre le darías al lugar adonde descansan los santos y elegidos? ______________
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4.       ¿A quién vio Enoc en el lugar de reposo? _________________________________________

5.       ¿Reciben y muestran alguno gloria, los santos y elegidos?____________________________
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6.       ¿Qué anheló Enoc?__________________________________________________________

7.       ¿Quiénes son los que no duermen?_____________________________________________

 

 

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