LAS PALABRAS DE YAHSHÚA - LECCIÓN 10 - EL AMOR A LOS ENEMIGOS
Las buenas nuevas (evangelio) deben ser conocidas por todos, porque esta es la Voluntad de Dios. Por ello en la CCL2O nos proponemos enseñarlas.
En esta oportunidad estaremos hablando acerca de las Palabras que nos dejó el
Adón, Yahshúa Ha Mashiaj.
¡Las palabras del Señor son Espíritu y son Vida!!! (Juan
6:63)
EL SERMÓN DE LA MONTAÑA
Con esta porción de hoy, terminamos el capítulo 5 del evangelio según
Mateo, el de las bienaventuranzas. Este texto corresponde al sermón de la
montaña.
La porción de hoy es la que exige el mayor reto para el creyente, el amor
hacia los enemigos y el desapego. Humillar la soberbia natural, frente al
atropello es quizá, el mayor desafío para un hijo de Dios.
Veamos:
PORCIÓN ESCOGIDA: Mateo 5:38
- 48
Oísteis que fue dicho: Ojo
por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo: No resistáis al
que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele
también la otra; y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la
túnica, déjale también la capa; y a cualquiera que te obligue a llevar carga
por una milla, ve con él dos. Al que te pida, dale; y al que
quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses. Oísteis que fue
dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo:
Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que
os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis
hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre
malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos. Porque si amáis a
los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los
publicanos? Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más?
¿No hacen también así los gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro
Padre que está en los cielos es perfecto
Juan nos presenta el amor de Dios en nosotros de la
siguiente manera: “Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a
los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte. Todo aquel que
aborrece a su hermano es homicida; y sabéis que ningún homicida tiene vida
eterna permanente en él”. (1 Juan 3: 13,14).
Sin embargo, el reto que impone el Señor, es mucho mayor
que el de Juan: “Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los
que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis
hijos de vuestro Padre que está en los cielos”. Y el Señor añade más
adelante: “Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis?”
Pedro cuando elaboró la escala de la perfección, que
aparece en 2 Pedro 1:5.7, consideró el afecto mencionado por Juan, en un
escalón más abajo del perfecto amor. Él dijo: “Vosotros también, poniendo
toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud,
conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a
la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal,
amor. Como podemos
ver, el amor es el último paso en la escalera de la perfección y, está por
encima, del afecto fraternal.
Está implícito en la propuesta del Señor, el negarse a
uno mismo y la renuncia a aquello que consideramos que es un derecho que nos
pertenece, que es considerar lo “mío, mío y de nadie más”. El Señor manda a
renunciar a aquello que creemos que nos pertenece, para que sea de aquel que lo
reclama.
¡Excelente lección!
PREGUNTAS:
1.
¿Qué se permitía en el Antiguo Testamento?
2.
Pero, ¿qué manda el Señor?
3.
Cita algunos ejemplos de renuncia que pondrías en
práctica, para mostrar ese nivel de amor que Yahshúa demanda
Comentarios
Publicar un comentario